La baja autoestima y la insatisfacción corporal son dos desafíos psicológicos que afectan a una…
Conoce ya los diferentes tipos de autoestima que existen
La autoestima es parte fundamental de nuestra personalidad y forma de vida. Nos ayuda a valorarnos a nosotros mismos, encontrar nuestros defectos y virtudes. Así mismo, debido a su influencia, es determinante en el bienestar personal, siendo esencial para tener una vida plena, sana y feliz. Así como la capacidad para relacionarnos con los demás y el entorno de manera positiva y sana. Podemos encontrar diferentes tipos de autoestima en total y cada individuo entra en esta categorización.
En este artículo te mostramos cuáles son los tipos de autoestima y cómo puedes saber en qué tipo de autoestima entras.
5 tipos de autoestima y sus características
La autoestima es inherente a todos y se forma en la relación con nosotros mismos y el entorno. Teniendo esto en cuenta, podemos encontrar 5 tipos de autoestima.
Autoestima alta-estable
Los sujetos con una autoestima alta y estable tienen las características de una autoestima sana. Son personas seguras de sí mismas y que confían en sus capacidades y habilidades. Es estable porque los factores externos (opinión de otros, circunstancias negativas) no les afectan al valorarse a sí mismos. Por ello, manifiestan su opinión sin que afecte su estabilidad.
Autoestima alta-inestable
En esta ocasión, la persona tiene una alta autoestima, pero es inestable, ya que los factores externos condicionan la percepción de sí mismo. Es decir, ante un fracaso se vuelve negativa y deja de confiar en sus capacidades.
Es complicado para esta persona aceptar las críticas y son poco tolerantes con el fracaso, lo percibe como amenaza y tiende a reaccionar de forma agresiva y con superioridad. La excesiva importancia a las críticas y a los errores les hace inseguros y provoca inestabilidad en su autoestima.
Autoestima baja-estable
Las personas tienen una baja autoestima, pero de manera estable. Es decir, los factores externos no varían la perspectiva negativa sobre sí mismos. Tienden a mostrarse indecisos y no son capaces de defender su opinión, ya que se sienten inferiores a los demás y temen ser rechazados.
Suelen ser personas que tienen sentimientos negativos y pesimistas y es un indicativo de trastornos psiquiátricos (depresión, ansiedad o elevado estrés).
Autoestima baja-inestable
Esta variedad está condicionada por factores externos. Los afectados tienen baja autoestima, pero ante un logro o éxito, esta aumenta. Sin embargo, cuando pasa la emoción del éxito, la autoestima tiende a descender.
Esta es la causa de que se considere inestable y vuelve a la persona muy vulnerable ante los hechos que realiza y el entorno donde se encuentra.
Autoestima inflada
Suele ser confundida con la alta autoestima, pero los sujetos se muestran como una persona segura que se respeta y se quiere, pero con una actitud de prepotencia. Incluso se sienten superiores a los demás.
Necesitan destacar sus virtudes y logros para conseguir reconocimiento y persiguen tener razón en todo lo que dicen y hacen, considerando que su opinión es la única válida. Además, no reconocen las críticas y errores, ya que culpan de ello al entorno. Sin embargo, aunque muestran gran superioridad, estas actitudes a menudo esconden una baja autoestima e inseguridades.
¿Cómo saber qué tipo de autoestima tengo?
La autoestima no es algo estanco, sino que se puede trabajar y mejorar para conseguir un bienestar en la vida. Por ello, te mostramos a continuación las definiciones de autoestima alta y baja para que tú mismo te autovalores.
Autoestima alta
Las personas con alta autoestima tienen las siguientes características:
- Se sienten satisfechas consigo mismas, tanto en sus virtudes como en sus defectos.
- Las limitaciones o defectos no provocan menosprecio en sí mismas, se quieren tal y como son.
- Saben dónde destacan y en qué deben mejorar. Tienen una actitud abierta ante las críticas y son flexibles a la hora de aceptar sus errores.
- Tienen una actitud abierta a experiencias nuevas y gran facilidad para afrontar desafíos.
- No sienten la necesidad de sentirse mejor que nadie y están cómodos recibiendo y dando cumplidos.
- Defienden su postura frente a los demás, expresando su opinión, pensamientos y sentimientos. No temen mostrar quiénes son.
- Tienen relaciones saludables, puesto que se respetan a sí mismos y a los demás.
- La alta autoestima estimula la independencia, autonomía y la propia aceptación.
- Pueden alcanzar los objetivos que se propongan y asumen la responsabilidad de sus acciones.
- Ante las inseguridades, no se sienten tan abrumadas y tienen facilidad para sobreponerse a ellas.
Autoestima baja
¿Y qué es la autoestima baja? A continuación, sus características:
- Las personas se sienten en constante insatisfacción y con falta de confianza en sí mismas.
- Tiene una excesiva autocrítica que provoca frustración.
- Dan demasiada importancia a sus defectos, incluso por encima de sus virtudes.
- No son capaces de determinar quiénes son ellas mismas y cuáles son sus virtudes.
- Presentan una actitud derrotista, triste, perfeccionista y sin espontaneidad.
- Reaccionan de forma exagerada ante los errores y no suelen correr riesgos para no terminar fallando ni sintiendo frustración.
- Predomina la dependencia y el temor al rechazo. Oculta sus pensamientos y sentimientos porque creen que no serán los mismos que los del resto.
- Constante indecisión por miedo a cometer errores y temor a hacer el ridículo.
Y tú, ¿cuáles de los tipos de autoestima tienes? Si tienes una autoestima baja recuerda que puedes mejorarla, puesto que no es algo estanco e inalterable. Contacta con nosotros para saber más.